Felices y benéficas vacaciones!

20 Jul

Fuentes Web

Decálogo para vacaciones

 1. Vive la naturaleza. En la playa, en la montaña, en la serranía, descubre la presencia de Dios.Alábale por haber hecho la naturaleza tan hermosa.

2. Vive tu nombre y condición de cristiano. No te avergüences en verano de ser cristiano. Falsearías tu identidad.

3. Vive el domingo, que en vacaciones sigue siendo el Día del Señor. Dios no se va de vacaciones. Tienes más tiempo libre, acude a la Eucaristía dominical.

4. Vive la familia. Dialoga, juega, goza con ellos sin prisas. Reza en familia. Asiste al templo también con ellos.

5. Vive la vida. La vida es el gran don de Dios, no hagas peligrar tu propia vida, y evita riesgos a la vida de los demás.

6. Vive la amistad. Desde la escucha, la confianza, la ayuda, el diálogo, el enriquecimiento y el respeto a la dignidad sagrada de las demás personas.

7. Vive la justicia. No esperes que todo te lo den hecho. Otros trabajan para que tú tengas vacaciones. Ellos también tienen sus derechos. Respétalos y respeta sus bienes.

8. Vive la verdad. Evita la hipocresía, la mentira, la crítica, la presunción engañosa e interesada o la vanagloria.

9. Vive la limpieza de corazón. Supera la codicia, el egoísmo y el hedonismo. Vacación no equivale a permisividad.

10. Vive la solidaridad. No lo quieras todo para ti. Piensa en quienes no tienen vacaciones, porque ni siquiera tienen el pan de cada día. La caridad tampoco toma vacaciones.

Estos diez puntos se resumen en dos: En vacaciones, sigue acordándote de Dios y del prójimo.

ORA EN VACACIONES

Orar

Señor Jesús, tú dijiste a tus discípulos  «venid conmigo a un lugar apartado y descansad un poco» Te pedimos por nuestras vacaciones

                 El afán de cada día multiplica nuestra vida  de quehaceres,  urgencias, agobios, prisas e impaciencias.

Necesitamos el reposo y sosiego.
Necesitamos la paz y el diálogo.
Necesitamos el encuentro y la ternura.
Necesitamos la oxigenación del cuerpo y del alma.
Necesitamos descansar. Necesitamos las vacaciones.

Bendice, Señor, nuestras vacaciones.

Haz que sean tiempo fecundo para la vida de familia,
para el encuentro con nosotros mismos y con los demás,
para la brisa suave de la amistad y del diálogo,
para el ejercicio físico que siempre rejuvenece,
para la lectura que siempre enriquece
para las visitas culturales que siempre abren horizontes,
para la fiesta auténtica que llena el corazón del hombre.

Haz que nuestras vacaciones de verano sean un tiempo santo
para nuestra búsqueda constante de Ti,
para el reencuentro con nuestras raíces cristianas,
para los espacios de oración y reflexión,
para compartir la fe y el testimonio,
para la práctica de tu Ley y la de tu Iglesia,
para la escucha de tu Palabra,
para participar en la mesa de tu eucaristía.

Tú vienes siempre a nosotros.
Tus caminos buscan siempre los nuestros.
Haz que en las vacaciones de verano,
sepamos remar mar adentro y te encontremos a Ti,
el Pescador, el Pastor, el Salvador, el Hermano, el Amigo,
y encontremos a nuestros hermanos.
Juntos realizaremos la gran travesía de nuestras vidas.
En tu nombre, Señor,
también en vacaciones,
quiero estar dispuesto a remar mar adentro.

Ayúdame. Te necesito, también en este tiempo.
Amén.

Conferencia Episcopal Española

2 respuestas a «Felices y benéficas vacaciones!»

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