Madre Encarnación (50), Sor Ascensión R, (75), Sor Agustina D, Sor Begoña E, Sor Inés B, Sor Inés S, Sor Cándida F, Sor Natividad P, Sor Teresa M, (60)
Celebración Bodas de Oro M. Encarnación - Sevilla, 11 de diciembre, 2019 Nuestra más fraternal ¡Enhorabuena! En vuestras Bodas de Oro, Diamante y Brillante
50, 60 y 75 años de hermosas historias, escritas en prosa, día a día, hora a hora, año tras año. Hojas y hojas marcadas y selladas por la mano sabia, maestra y esponsal de un Dios enamorado, con instrumentos de primera categoría, comunes, corrientes y dócilmente manejables que se han dejado conducir al estilo y al ritmo del Divino Escritor.
Cada una, desde sus lugares de iniciación vocacional, comenzasteis a pasar las páginas lenta y ágilmente, en nuestra Andalucía amada. Y cual jóvenes y ardientes atletas de la caridad, recorristeis decididas y valientes, caminos desconocidos, de día y de noche, con alegre entusiasmo, alimentadas y cimentadas en la oración, reforzadas en la fraterna comunidad; con vigor apostólico llevando con vosotras: alivio y consuelo, compañía y esmerada caridad, a cada casa, a cada enfermo, a cada hogar.
¡Cuántas estrellas alumbrando esas noches oscuras que el firmamento azul de Andalucía sostiene, para que brille la esperanza, caliente la frialdad y avive la fe de tantos enfermos que os encomienda el carisma abrazado con esmero y gratuidad!
Muchos capítulos se fueron abriendo y narrando con total disponibilidad de quien “sólo sirve para servir”, sea cual fuere la tarea, la misión, la parcela que ha de labrar y cultivar.
Hoy, vuestras Hermanas de esta querida Provincia de Andalucía, bendice a Dios por vuestra FIDELIDAD y apoyan el ritmo que Él nos marca en esta realidad de disminución, con visión de luz,de esperanza, porque el aleteo del Espíritu se siente purificando, alentando, vivificando y santificando. Su voz se oye cerca y su mano sigue escribiendo nuestra historia con líneas rectas y seguros trazos: “Provincia de Andalucía, Siervas de María, sigue sembrando con tu delicada caridad: sanando heridas, cuidando enfermos, acompañadas soledades, alegrando a tristes y solos, acercando a Dios quien alejado de Él está”. A mí me lo hicisteis, venid benditas de mi Padre!
¡Qué 50, 60, 75 años tan repletos de: hágase, Fiat! En María y Madre Soledad, dejamos nuestro presente y futuro bien confiados, seguras de su protección y sus mejores cuidados, porque “heredad suya somos” en la que Dios se va recreando, la Iglesia se adorna y la humanidad doliente encuentra su fiel samaritano.
Desde Sevilla, Almería, Granada, Córdoba, Badajoz, Málaga y La Laguna, con todo el cariño y gratitud que os mereceis, queridas Madre y Hermanas:
¡ENHORABUENA! FELIZ Y ETERNA ALIANZA HASTA EL FINAL!
¡Gracias por vuestra FIDELIDAD y abnegada disponibilidad!
Sevilla, diciembre de 2019
